Mediante el buzón, «los vecinos pueden hacernos llegar sus consultas, ideas o quejas, las cuales son directamente remitidas al equipo administrativo del Ayuntamiento y al alcalde, Antonio Pozo Pitel». Así, «dentro de lo posible, se intentará responder a todos los mensajes que lleguen al buzón y, por supuesto, dar solución a aquellos problemas que se planteen». Se trata «de una herramienta con la que poder estar al corriente de algunos detalles que, de no ser por la colaboración ciudadana, podrían ser pasados por alto de manera involuntaria».
En los días que lleva en marcha el Buzón, «han coincidido varias quejas con respecto a los excrementos de los perros en las calles». Al suponer esto «un problema que afecta a muchos vecinos, y que tiene su origen en la falta de concienciación de los dueños de los animales, la Policía Local va a llevar a cabo próximamente una campaña de sanciones y de reparto de bolsas para recoger las heces». Otras respuestas han girado en torno a temas «como el convenio que se ha firmado recientemente para la recogida de pilas usadas en varias tiendas del pueblo, el encargo de una placa identificativa en la calle El Hinojo y las negociaciones para pintar la pista del pabellón deportivo con pintura antideslizante».
