Un cierre lleno de nuevos comienzos
El proyecto “Somos capaces” de Plena Inclusión Montijo y financiado por el SEPAD, ha llegado a su fin tras una etapa cargada de aprendizajes y desarrollo.
Este programa ha ofrecido a personas con discapacidad la posibilidad de formarse y demostrar su valía en diversos sectores laborales, reafirmando que la inclusión no solo es posible, sino también enriquecedora para toda la sociedad.
Formación y desarrollo en múltiples ámbitos
A lo largo del proyecto, los participantes adquirieron habilidades en áreas como la hostelería, el cuidado de animales, la atención en comedores escolares y el trabajo en centros para personas mayores.
Estas experiencias no solo impulsaron su formación profesional, sino que también fortalecieron aspectos personales como la confianza, la autoestima y la autonomía.
Gracias a esta iniciativa, se rompieron barreras que antes parecían inalcanzables, demostrando que, con las herramientas adecuadas, todos tienen la capacidad de destacar y aportar valor a su entorno.
Impacto en la comunidad y en las empresas
El proyecto “Somos Capaces” no solo transformó las vidas de los participantes, sino que también consolidó lazos entre empresas, familias y la comunidad. Estas redes de apoyo han generado un tejido social más inclusivo, marcando un cambio cultural que trasciende el ámbito laboral y refuerza el reconocimiento de los derechos de las personas con discapacidad.
Un final que es solo el comienzo
Aunque este proyecto llega a su fin, su impacto sigue presente. Los aprendizajes y conexiones formadas durante este tiempo impulsarán a los participantes hacia nuevos retos, más preparados y seguros de sí mismos. Además, iniciativas como esta continúan promoviendo una sociedad más inclusiva, donde cada persona pueda demostrar su potencial.
Plena Inclusión Montijo reafirma su compromiso con la inclusión y el avance conjunto, recordándonos que siguen siendo capaces de construir un futuro donde todas las personas tengan oportunidades para brillar.