El Juez aplica la jurisprudencia europea y del Tribunal Supremo, y decreta que el banco abusó del cliente al obligarle a pagar los gastos de Notaría, Registro, e Impuesto.
En una sentencia pionera en Extremadura, el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Mérida ha condenado a la entidad Caixabank a devolver a un cliente los gastos que le obligó a abonar con ocasión de la firma del préstamo hipotecario que firmó para la compra de su vivienda.
La sentencia obliga al banco a devolver a este cliente los gastos de Notaría, Registro e Impuesto de Actos Jurídicos Documentados.
Según el Despacho Moreana, cuyos Letrados Carlos Fidalgo y Daniel García han sido responsables del asunto, «el Juzgado ha seguido a la letra lo que dispuso el Tribunal Supremo en su sentencia 705/2015, sin entrar en las disquisiciones teóricas sobre si es el banco o el cliente el que tiene que abonar tal o cual gasto. La demanda argumenta que cuando el banco abusa del cliente imponiéndole abonar todos los gastos de la hipoteca, sin valorar cuáles ordinariamente tendría que pagar la entidad y cuáles el cliente, la legislación y la jurisprudencia de la Unión Europea obligan no sólo restablecer el equilibrio y repartir los gastos como debería haberse hecho desde el principio, sino a castigar al banco abusador haciéndole pagar todos esos gastos, para disuadirlo de obrar así en el futuro».
Amparados en la jurisprudencia del Tribunal Supremo y en las sentencias que poco a poco van dictándose en distintos lugares de España, cada vez son más los consumidores que están reclamando sus gastos de hipoteca. Sin embargo, no siempre los jueces se muestran tan receptivos a atender las peticiones de los hipotecados. La defensa de los bancos es cerrada, y las entidades financieras en estos pleitos multiplican los argumentos que, a su juicio, hacen que todo lo más deban ser obligados a devolver parte de los gastos, pero no todos.
Esta sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 4 de Mérida, afirman desde el despacho de abogados, «ciertamente constituye un motivo de esperanza para los consumidores afectados, no sólo en Mérida sino en toda Extremadura».
