In memoriam

Publicidad
por José Manuel Rodríguez Figueredo

José María,
más que cuñado, amigo,
hoy hace ya un año
que está nuestro banco vacío…

No hubo campanas doblando a duelo
ni llantos que delataran tu muerte,
que así quisiste: morir de esta suerte,
en silencio y en secreto, sin revuelo…

No hubo muerte guardada con más celo,
ni última voluntad más respetada,
ni hubo familia más confabulada
para no traslucir su desconsuelo…

Ya has vuelto a la tierra hecho ceniza
y, espolvoreado, al agua del río.
Del olivar, a la tierra caliza,

… y al Guadiana, según tu albedrío.
Descanse al fin en paz tu alma huidiza,
que en tu recuerdo se alza un griterío…