Niños y niñas de la Escuela infantil Alborada han participado en naturalizar su patio

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Cuando el calor aprieta y ya casi tocamos el final del curso, desde la Escuela infantil Alborada recuerdan momentos tan importantes como los que «hemos vivido en el patio de nuestro centro, lugar de juegos y encuentro con los amigos de otras clases».

«Este año, como tantos otros, hemos intentado naturalizar nuestro patio, sembrando con los niños y niñas plantas autóctonas, donadas por los Viveros Forestales de la JEX , que nos han ayudado a despertar en ellos el interés por el cuidado de la Naturaleza y el Medio Ambiente», informan desde la dirección de la Escuela.

«Cada mañana, como si de un juego se tratase, las hemos regado con ellos para mejorar nuestro entorno, porque  nuestro patio, que pronto se quedará vacío de risas y juegos, es una de las señas de identidad de nuestro centro», comentan.

El equipo educativo de Alborada recuerda que «en septiembre volverán nuevas risas, nuevos juegos y nuevas amistades que se forjarán seguramente para toda la vida. Las de este curso  continuarán en el colegio, donde todos ellos seguirán creciendo y jugando cada día».